Morir soñando

Sin duda alguna que antes de sacar a flote la Reforma Energética, la Fiscal y todo lo que le ocurra al Presidente Peña, tendrá que arreglar primero el pequeño detallito que se llama Reforma Electoral para que siga caminando la carreta como debe ser y no poner los bueyes detrás sin ofender a los participantes.

Si no se aceita la maquinaria electoral será muy difícil el consenso y concordancia entre los diferentes criterios para sacar adelante las demás leyes.  ¿Está fácil no?

Así es que no coman ansias, la violada hacendaria de la que seremos objeto, se dará, pero faltan lubricantes ya verá.

Una de las preocupaciones y aceptando que miramos caballo ensillado y se nos ofrece viaje, es porque no aprovechar la inercia para recordar que con la mitad de los legisladores se podrían sacar las leyes adelante, haciendo una legislación esbelta, inteligente y agradecida, sin fuero, con menos viajes de recreo interparlamentarios, sin actualizaciones en otros países, con mayor cantidad de días y horas laboradas, cincuenta por ciento menos de asesores, prescindir de los choferes, optimizar a los guaruras, hacer productivas  las sesiones.

Que dejen tabletas y celulares en la entrada y que las edecanes sean de doble propósito, trabajo y más trabajo, y que no tengan que pasar por la recamara para llegar a la Cámara, que cada Diputado o Senador llegue en su vehículo, que gasten  su gasolina, que desparezcan las amantes de la nómina, que los días que se ausenten en verdad sean descontados, como en la escuela dos retrasos una falta, tres faltas un descuento, seis descuentos y avisen al suplente.

Son tan profundos y prolongados los sueños que como no cuestan nada le seguimos…

Empatar fechas para que las elecciones sean concordantes y que la publicidad se maneje con decoro y con asepsia, que terminando la elección la propaganda que no sea retirada a tiempo y en su totalidad signifique multa de verdad a los partidos y contendientes.

Que las infracciones sean cobradas por alguna iglesia Salesiana para que como perros de presa hagan pagar a los deudores y si no, que los exhiban.

De igual forma que desaparezcan plurinominales y la representación proporcional,  que si un Partido no logró su mínimo aceptado pierda el registro y a otra cosa mariposa, que si se tiene que gobernar con uno, dos o tres Partidos que así se gobierne y verá la lana que nos ahorramos.

Total, como gustamos de seguir soñando, anote:

En lugar que el pleno sesione dos días a la semana, que lo haga todos los días, y que después de la reunión plenaria, descansen, se alimenten y a comisiones.

Que se eviten al máximo reuniones partidarias y que sean en días inhábiles.

Que las viandas no sean ostentosas y que se coma lo que los demás comen y no platillos exóticos de caviar con champiñones al champagne, sino tacos a vapor de papas y frijolitos muy sabrosos.

Que se vengan de su casa desayunados para evitarnos una vianda y que no estén comiendo entre comidas que más que legisladores,  parecen  cerdos en engorda.

Un par de asistentes por grupo legislativo que estén calificados y no novios de la hermana de la querida que es pasante y tiene materias pendientes, y llega a la Cámara para costearse los estudios.

Que todas las reuniones se den en las instalaciones de los Congresos y no en salas rentadas de hoteles y restaurantes que cuestan un ojo de la cara.

Que termine el bono legislativo, y que si alguien desea hacer proselitismo en su Distrito que le gaste a su chequera.

Bueno, desperté y seguimos donde mismo, esperando que nuestros nietos puedan ver cuando el destino llegó de la mano con la realidad.

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Obed Campos