Veracruz: El paraíso perdido
Veracruz gana sin bulla y alegría, triunfa con cifras hace décadas nunca vistas, pero nadie muestra su alegría; todos callan,temerosos. ¿Qué sabrán?... [Seguir leyendo]
Cerco de la ignominia
Ahí lo tenemos; flácido, pobre, incongruente, mentiroso y con una debilidad que espanta, que demuestra lo poco de su posible influencia. En su primer día, asistieron algunos acarreados (250) y los miembros de la CNTE (400), que están acampado en la cercana Plaza de la República.
Un fracaso, sin duda; el junior dijo haber visitado “algunos puntos estratégicos; considero que ha sido un éxito” (sic), al tiempo que Batres se desgañitaba, portando un modesto micrófono.
Pronto han olvidado que AMLO representa todo su movimiento; faltó el líder que hace vibrar a
multitudes; el sólo se representa; su temporal ausencia-por un mal que le aqueja- es evidente.
¿Dónde están los 15.6 millones de votantes de AMLO en la elección Presidencial?
¿Y los 1.6 millones de “abajo firmantes” que repudian la Reforma Energética de Peña Nieto?
No me cabe duda de que las redes sociales fueron las que inclinaron la balanza eleccionaria.
Influyeron, haciendo quedar mal – de paso – a las empresas encuestadoras más serias.
Eso ha quedado para la historia; para que el PRI y Peña Nieto se apresten a combatir en ese misterioso ámbito social que suele dar muchos dolores de cabeza a los gobernantes del mundo.
El desangelado cerco mostró la debilidad de las propuestas de la izquierda, basadas ésta vez en el lloriqueo y el berrinche de un descontinuado, vetusto Cárdenas, que sirve de blindaje para que los “chuchos” continúen gobernando al PRD; la salida de AMLO de ese Partido los condenó a nutrirse con sólo la mitad de sus afiliados. La gente no acude a “repudiar” algo que desconoce; van cuando AMLO los convoca. Su carisma acaba en su persona; es difícil e inútil sustituirlo.
El desencanto ha sido mayúsculo; resultó un cerco de celofán, quebradizo y frágil.
Con sedes alternas o sin ellas, auguro que la Reforma Energética prosperará; porque las demás reformas prosperaron con similares negociaciones; porque hay buenos operadores, porque se desarrollaron en un clima de legalidad e inteligencia; prevaleció la obligada negociación.
La plataforma de despegue de estas reformas, el Pacto por México, cumplió con su cometido. Peña Nieto puede ahora planear la puesta en marcha de éstas nuevas leyes que significan mucho para un México aletargado; el rezago es bastante, diverso, difícil; la tarea será dura y pesada, pero ahí están plasmadas las nuevas leyes que seguramente impulsarán un país somnoliento ante los embates de sus múltiples problemas. México necesita empezar una nueva era de trabajo creativo.
Es tiempo de “mover a México”; ahí están las reformas, que no han sido pocas.
La de Telecomunicaciones, la Hacendaria, Financiera, de Trasparencia, la Político – Electoral, la de Amparo, de Procedimientos penales. Falta sólo la Energética, para la próxima semana.
Los operadores en la Administración y en las dos cámaras legislativas han hecho un trabajo excelente; logrando consensos estratégicos; es mucho lo logrado; con la mitad quedaríamos conformes; imperó el diálogo y la concertación. Espero ahora su implementación.
El chantaje paralizador no prosperó; funcionó la cordura y la prudencia. Enhorabuena.
