Fiesta de serpentinas y mucho confeti

Las innovaciones informativas con las que contamos algunos hoy en día, a través de la web, portales, blogs y redes sociales producen, aunque sea en unos cuantos, un intenso escalofrío que eriza nuestra piel.

Digan lo que digan los medios formales y oficiales así como las declaraciones de los funcionarios y los políticos, videos clandestinos, como el de la «Tuta» desatan suspicacias y siembran todo tipo de dudas.

Claro que en el colectivo ha estado, está y estará siempre la idea de que solo a los grupos de poder, legal o ilegal, les interesa profundamente detectar o designar a las autoridades visibles, llámenle presidentes, gobernadores, legisladores jueces y hasta policías.

El escándalo de los Calderón, Cocoa, Felipe y su primo, la deuda millonaria, primero con la Empresa, luego con la Familia, la traición a los Templarios, su amarre con los Zetas o los de la Nueva Generación y vaya usted a saber que más, nos llenan de desconsuelo, pues seguro siempre ha habido contubernio, connivencia de los mas altos cargos de responsabilidad del país con la Maña, nacional o extranjera, pero en muy pocas ocasiones se ha sabido de una denuncia hecha pública como en este caso.

En Egipto, Hosni Mubarak y en Perú, Alberto Fujimori, por ejemplo, han sido puestos tras las rejas públicamente. Para acallar las protestas, puede ser, pero los han exhibido tal y como son, unos políticos abusivos.

Allá han sido acusados de crímenes de lesa humanidad,  ¿los funcionarios mexicanos abusivos, que han dejado al pueblo sin salud, alimentación y educación no debieran ser, cuando menos, exhibidos y humillados públicamente?

¿Cuando ocurrirá algo parecido en este país? ¿Cuando se hará pagar a los que la deben, sobre todo en tratándose de «servidores públicos»?

Dicen que los niños, los borrachos y los delincuentes traicionados siempre dicen la verdad ¿o no?

Confeti

Carlos Slim, Empresario mexicano, insistió en su propuesta de jornadas laborales de 11 horas por 3 días a la semana y un retiro después de los 70 años, para asegurar un lugar en mundo laboral para los más jóvenes.

Esto además garantizaría dar paso a nuevas generaciones creativas e innovadoras en el sector productivo.

Este tiempo exige cambios rápidos que necesitan gente innovadora, creativa y entusiasta que no tenga miedo a los  cambios que claman las nuevas tecnologías.

Esta idea no es nueva, ya Slim en una conferencia organizada por la ONU había señalado que ello daría 4 días libres para estar con la familia, dedicarse a innovar, a cultivarse o a crear.

Respecto a la edad de jubilación, Slim dijo que el límite actual se impuso cuando el trabajo era más físico y la gente vivía hasta los sesenta o algo más, pero hoy en día vivimos hasta los 85 o los 90 años.

Una vez que los trabajadores lleguen a los 60 años podrían tener jornadas de 35 horas semanales en lugar de 40 y los gobiernos deberían estudiar en qué sectores se van a desarrollar los nuevos empleos en el futuro próximo, dijo.

Slim agregó que la iniciativa privada debe realizar una mayor inversión para que sus trabajadores estén mejor capacitados y educados, la sociedad requiere más educación y mejores condiciones laborales, donde exista libertad, oportunidad y derechos humanos.

Dijo que se debe luchar contra la ignorancia y la pobreza a través de buenos empleos apoyados en nuevas tecnología para que la economía y el mercado, del país, puedan crecer con innovación y productividad.

Más confeti

Hay que estar pendientes de las nuevas acciones que tomará la cúpula de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana luego de las declaraciones del Papa Francisco en contra del capitalismo rapaz, expoliador que ha abandonado a los más pobres y a los más necesitados.

Un puñito más de confeti

¿Que va a pasar con el pacto, avanzará esa armatoste, que debido a lo «chueco» de algunas piezas parece que ya se rompió y uno de los componentes salió volando?
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Obed Campos