Gandhi

Una de las personas que dejaron  huella durante el siglo XX  fue, sin duda, un escuálido sujeto al que se le conoció con el nombre de Mahatma Gandhi.  Sin más armas que la resistencia  pacífica, Gandhi despertó la conciencia en millones de personas por todo el mundo.

La vida de este extraordinario ser humano es relatada en detalle por Louis Fischer, quien se documentó ampliamente para entregarnos una de las más completas biografías. Como se sabe, Gandhi recibió una educación ortodoxa pero se resistió a ser un comerciante como su familia lo esperaba,  y decidió estudiar la carrera de Derecho para lo cual viajó a Inglaterra.

A  su regreso consigue un trabajo en Sudáfrica, donde el apartheid lo sacude en una ocasión en que viajaba por tren. Había comprado un boleto de primera clase pero una persona de tez blanca se quejó de su presencia por lo que lo “invitan” a cambiar al vagón de segunda clase. Al negarse a cambiar de lugar, Gandhi es obligado a descender y pasa la noche sentado en la estación, reflexionando profundamente sobre el atropello, el cual descansaba en las propias leyes injustas.

Al día siguiente emprende una serie de medidas en apoyo a otros conciudadanos hindús y, mediante  protestas pacíficas logra algunos cambios favorables. Al viajar a su país de origen, comienza una serie de campañas en pro de los derechos de sus compatriotas y es encarcelado en varias ocasiones.

Entre los libros que  lo influyeron, esta “La desobediencia civil” de Henry David Thoreau.  La India estaba bajo el dominio inglés y ostentaban el monopolio de la producción y venta de sal.  Ante tal situación, Gandhi escribe una carta al primer ministro solicitando se reduzca el precio de la sal, pero no recibe respuesta, por lo que convoca a una “marcha por la sal”  y lo acompañan un puñado de aldeanos. El plan es llegar al mar y obtener la sal directamente, lo cual está proscrito por el régimen.

A su paso por los diferentes pueblos se van sumando miles y cientos de miles de personas en un rio humano inconmensurable. Cuando llega a la playa y toma la sal, Mahatma  es arrestado junto con otros muchos más. En ese momento el imperio británico  supo que había perdido una colonia más y poco después acepta su independencia.

El fanatismo religioso, la pobreza y la ignorancia de millones llevan a la separación de la India y la creación del Estado Pakistaní.  Poco después, el 30 de enero de 1948, fruto de este fanatismo, Gandhi es asesinado a los 78 años de edad mientras se encontraba en un templo.

Las balas pudieron silenciar el cuerpo de este gran hombre, pero su legado en pro de la no-violencia, de la resistencia pacífica y del amor por el prójimo, siguen vibrando, más de medio siglo después, en millones de corazones en todo el mundo, como si sus cenizas,  esparcidas  en el rio Ganges, hubieran germinado en el cosmos.

Obed Campos