“No es igual cantidad, que calidad”
Sabiduría popular
Antes de que se rasguen las vestiduras y se me tiren a la yugular aclaro: no critico, simplemente comento algo que me llama la atención y que forma parte de una nueva moda en la comunicación: el periodismo desde redes sociales.
Saga de los “influencers” de otras redes sociales que comenzaron monetizando por la alta reproducción de sus contenidos y después empezaron a cobrar a clientes por sus menciones, hoy hace su aparición un nuevo estilo de periodismo, el que publica sus contenidos en Facebook y la mayor parte de ellos son boletines y comunicados oficiales.
Ni me asusto, ni me espanto. Con casi 50 años de andar en estos caminos, he visto casi de todo y he tenido la oportunidad de estar despachando desde los dos lados de la barra. Como responsable de comunicación me tocó ver el esfuerzo de algunos de la vieja guardia que editaban su periodiquito en formato media carta con “stencil” y mimeógrafo en tirajes cortos, sin grandes ambiciones de diseño, pero con deseos de ganarse la vida.
Reconozco el esfuerzo de quienes aún imprimen sus revistas y publicaciones, así como el de quienes mantienen un sitio web, porque el problema no es abrirlo, sino mantenerlo. Detrás de ello hay una inversión y por lo mismo una preocupación por insertar otro tipo de contenidos sin limitarse exclusivamente a la publicación de boletines.
Sin embargo de un tiempo a la fecha han hecho irrupción los periodistas del Face, personas que abren una cuenta en esa red social a nombre de un “medio de comunicación” y ahí comienzan a publicar comunicados de municipios y dependencias.
No digo que no sea válido, porque lo es, sin embargo considero que quienes cometen el error de darles juego, me refiero a los encargados de comunicación que los ubican en el mismo plano que los medios formales y los independientes, confunden la cantidad con la calidad y eso, tarde o temprano, les acarreará problemas con sus jefes cuando estos últimos se empañiquen por las críticas y señalamientos que les hagan si no pasan a reportarse con algunos centavitos cada mes.
Y entonces tendrán que venir las explicaciones y aclarar que no tienen la misma penetración, poder e importancia, que no tienen muchos lectores, que están ahí, pero que sus críticas no tienen repercusión.
Son “gremlins”, les echas agua y se reproducen por miles, aunque ni todos juntos alcancen el nivel de audiencia de los medios de verdad.