Dicen que todas las despedidas tienen una razón.
La de CIN CERON es el haber llegado a una meta que me impuse.
Este día será la última columna que escribiré, sin antes agradecer a ScriptaMty y a su Director General, Obed Campos, el haberme dado la oportunidad de publicar mis comentarios.
Tal vez el retiro sea prematuro, pero es necesario hacerlo.
Durante las columnas siempre busqué el dato puntual, el pronóstico más acertado, el comentario propositivo y la crítica merecida.
Me retiro satisfecho de haber pronosticado la caída de un candidato a presidente municipal que intentó burlar las leyes electorales.
Me retiro ofreciendo a ese partido político que falló en su postura, no volver a equivocarse y a buscar el beneficio de una comunidad, no de un político.
Si de algo le sirve a ese partido político, entre sus militantes hay gente valiosa que no ha tenido oportunidad de servirle a su pueblo.
Ayer leí en El Norte que un grupo de militantes del PAN habían renunciado a su partido por no estar de acuerdo en que esta organización política abanderara a un candidato que hacía algunos años arrebató, según ellos, el triunfo a uno de sus integrantes.
Ahora apoyarán a la candidata a alcaldesa de la capital de Nuevo León y votarán por ella, más no se afiliarán al partido que la patrocina.
Eso me indica que Acción Nacional no es el partido fuerte que presumen algunos, sino que ya comenzó a desmoronarse.
Me entero por otro lado el cobarde atentado que sufrió la candidata a regidora de un partido político, cuando desconocidos y sospechosamente integrantes de un partido político que se siente perdido, le incendió sus dos automóviles, su patrimonio.
Me retiro preguntando quien está más ciego, si Baltazar Martínez, que le ganó a las autoridades electorales el derecho a ser candidato, apoyándose en una mentira, o el IEEPCNL.
El hecho de usar lentes, no lo hace invidente, ni mucho menos minusválido, para quien la Ley tiene previsto ese espacio.
Me retiro deseando que la sociedad sea quien decida a quien otorgar su voto este 2 de junio y que los que tienen el poder se hagan a un lado.
Es posible que hoy si atienda la invitación que me hizo mi estimado amigo Hugo Díaz de León, a la Mesa de los Periodistas para intercambiar ideas, discutirlas y alimentarme de la política que ahí sé que se maneja.
Hasta aquí llegué.