Decir que me sorprende mentiría, las estupideces denunciadas por Adrián de la Garza candidato que enfrenta a la mentirosa Mariana esposa de mentiroso-mentiroso en pos de la gloria de administrar Monterrey, ha sido moneda en curso en todos los tiempos y por todos los partidos. La guerra sucia de robar pendones, desaparecer trípticos, boicotear reuniones, pintarrajear bardas sobreponiendo letras a publicidad autorizada o suspender edificios que se atrevan aceptar publicidad de otro candidato por parte de la autoridad estatal es una verdadera canallada, como en este caso que Samuel el mentiroso suspendió un edificio que mostraba una híper-manta de Adrián, es una felonía, o como quiera usted calificar.
Se me antoja actitud de un chamaco irresponsable como suelen ser sus manifestaciones de niño chiflado que no respeta ley, reglamento ni orden legal, porque para eso… ¡es gobernador qué caray! Como cuando niños tocábamos el timbre de una casa y corríamos o quebrábamos un vidrio huyendo despavoridos por la simple razón de carcajearnos.
Este es el gobernador que eligieron y que ahora promociona a su esposa que inadmisiblemente la anotó en una lista para que MC ofreciera la candidatura solo por su belleza física, porque en medio de sus orejas hay un crisol vacío.
La escuché personalmente en una junta de vecinos por el sur de la ciudad donde resido y di cuenta de sus proyectos e ilusiones, muy probablemente consejos de su “tío” Hernán Villarreal como el de aumentar los recorridos en bicicleta construyendo jardineras para acotar los carriles de circulación de autos para que los peatones caminen libremente… No entiende Mariana que esto no aplica en nuestra ciudad por su clima extremo que está sobre 40 grados a la sombra o menos cinco y no tenemos una temperatura europea, o al menos como en la CDMX que se alarman cuando sube el termómetro a los treinta.
Ya padecimos las torpezas de Luisín Donaldín Colosín que hizo nada y lo poquísimo que inició lo dejó inconcluso como las jardineras de Ocampo, las banquetas de Juárez y los inservibles corredores del primer cuadro, causando con ello congestionamientos vehiculares aumentando ahorcamientos donde los pocos camiones que han llegado de China hagan interminable la espera a los pobres transeúntes que imploran llegar a su trabajo o a sus hogares.
Una constante queja que recibimos con frecuencia es que el acceso a la Junta de Conciliación y Arbitraje en la avenida Churubusco al norte donde tendremos que ir en cualquier momento, como acusado o como fiscal, es imposible para los normales y ordinarios seres humanos, pero para los que rebasamos la edad de la discapacidad o no tenemos la fortuna de tener una Cybertruck como la del mamón gobernador, es un viacrucis teniendo que buscar el retorno que estaba frente a la Unidad Deportiva, hasta Ruiz Cortines.
Uno de los inoperantes amigos de Samuel el mentiroso-mentiroso gobernador, Mario Martínez presidente de la JLCA jamás se le ocurrió que podría haberle sugerido a Hernán Villarreal —el tío— que le dijera a Donaldín “desapareciera” momentáneamente el camellón para llegar con menor dificultad a los que tenemos la necesidad de presentarnos a pagar… o a cobrar, pero Mario es un pobre diablo improvisado que Samuelito le regaló el puesto y tanto Donaldín como el tío mamarracho, no tienen idea de lo que es servir a la comunidad, así de simple.