Siento admiración por Salvador Borrego que de las empresas serias dedicadas a la numerología, estudios y preferencias definen por medio de encuestas quiénes son los personajes o instituciones que gozan de popularidad y por ende captarían mayores adeptos al momento de sufragarlos. Pero desearía saber el método que utilizó para ilusionar al chamaco imberbe Luis Donaldo Colosio Riojas haciéndolo creer que tiene tamaño para portar la banda presidencial.
Admirado doctor Borrego, perdón, pero ese jovencito no tiene más equipaje que su apellido y perdón de nuevo, su padre fue entre otras cosas magnífico orador, pero no podemos ni debemos exaltarlo a la tierra prometida cuando fue asesinado porque era candidato, ergo, estamos en todo caso frente a un buen referente competidor y no presidente de la república. Pero el chavito es otra barbacoa, no confundamos las paridas con las preñadas.
Comentario al margen dijera el señor Franz Kafka les platico una escena genuina cuando fue gobernador Jaime Rodríguez “N” -je je- estábamos en el H. Congreso del Estado de Nuevo León donde atendería una invitación de los compañeros legisladores. Habiendo llegado puntual a la cita para llevarlo al pleno aguardaba en la biblioteca para que una comisión de cortesía lo acompañara al recinto. Tuvo la ocurrencia Luis Donaldo Colosio -DIPUTADO- ingresar al privado para una salutación al ejecutivo y un pelagatos guarura del Bronco lo paró en seco poniéndole una mano en el pecho: “tengo orden de que nadie puede pasar”, ignorante uno y ¡mucho más el otro!
Los que estábamos presentes no podíamos dar crédito y no faltó uno que comentara en voz alta: “si fuera yo el diputado, hubiera corrido hasta al gobernador”… Cómo es posible que un nalgas miadas hubiera avergonzado al legislador que como perro con la cola entre las patas prefirió retirase ante el asombro nuestro y sonrisa del guarura. Naturalmente el gobernador ni se enteró del desagradable suceso.
¿Ese es el jovencito que quieren ilusionar que tiene tamaño para ser adulto? Un chamaco que no tiene perfil, tamaño ni prosapia para llenar unos zapatos de ese tamaño. Dicen que, para ser torero primero, se necesita parecer ser torero y este niño todavía tiene la leche en los labios de los calostros como dijera Cruz Treviño Martínez de la Garza refiriéndose a Silvano su hijo.
Durante el vía crucis por el que está atravesando Samuelito que no encuentra la salida, hasta modestas autoridades como la alcaldesa de Allende N.L. Patricia Salazar saliéndose de un convite familiar habló fuerte y se hizo escuchar ante los ciudadanos de la región citrícola, pero Luis Donaldo no tiene voz ni pantalones para gritar en su colonia, menos para hacerse escuchar en la ciudad que intenta gobernar, porque le falta lo que al carrizo… corazón.
En resumidas cuentas, que quieran inflar un globo porque no hay más, de acuerdo, que está tan trillado el jardín que no hay más flores que cardos queriéndose aparentar fragantes orquídeas, más de acuerdo, pero Luis Donaldo parado frente al “Carnal” Marcelo Ebrard no sostiene una conversación de tres minutos porque hay un mar de diferencia y un desierto de distancia, bueno no tiene nada que hacer a un lado de la también inflada Claudia “Niña de mis ojos”, que ya es mucho decir.
MENUDENCIAS: Ahora resulta que el trenecito Maya de la ilusión es considerado “Obra de Seguridad Nacional e Interés Público” haciendo válido el apotegma de su caciquil demanda “se hace porque se hace”. A partir de ya, las obras que proyecten, analicen y construya el gobierno federal califican en ese rubro para que automáticamente no estén sujetas a revisiones, concursos, amparos y auditorías. Y luego dicen que este señor está en sus cabales. ¡No jodan! Lo mismo que los otros vulgares canallas del pasado… pero con mayor cinismo.