Contrario a lo que muchas mujeres piensan, que el culpable en una relación siempre es el hombre, que el malo de la novela es el varón y que los intereses oscuros y mezquinos solo pueden venir de su parte al momento de un divorcio, déjenme decirles que no es cierto. Al momento del divorcio conoces realmente con quien te casaste. Conoces su esencia, su Alma!!
En una pareja hay dos miembros y cada uno tiene un 50% de la responsabilidad del matrimonio, cuando ese equilibrio y equidad se rompe empiezan los problemas.
Debido a la economía nacional, los roles funcionales han cambiado, atrás quedaron las mujeres que solo se dedican al hogar y los hombres que son los únicos que trabajan y mantienen al 100% el hogar y los hijos. Hoy en día hombres y mujeres trabajan por igual, algunos con más responsabilidades que otras.
Hoy hay hombres que lavan y planchan, que se dedican a cuidar a los hijos, que lo mismo son capaces de llegar a un 7 Eleven a comprar toallas sanitarias para la hija adolescente que se desvelan lavando el uniforme del niño porque lo ensucio demasiado y no aguanta otra puesta, son los que andan haciendo figuritas en la madrugada, los que se levantan como zombies y sin una taza de café los llevan a la escuela en medio del tráfico.
Saben que es lo mejor… lo hacen con gusto, por amor a los hijos. Están orgullosos de sus logros y se muestran contentos cuando dicen que carrera están estudiando o el grado que cursan, muestran fotos y son el “papa gallo” felices con todos sus triunfos.
Estos hombres sufren y lloran en silencio por su divorcio, pero principalmente por la separación de sus pequeños; y aquí es donde se nota la clase de padres que son ambos.
La mujer inteligente que ama a sus hijos jamás los pondrá en riesgo. Pensara en ellos, en su seguridad, su bienestar y salvo que existan causas graves que lo justifiquen, SIEMPRE alentará la convivencia con el padre. La mujer inteligente sabe que un divorcio es entre los cónyuges NO ENTRE LOS HIJOS.
Los hijos, son hijos de ambos cónyuges; ambos padres tienen por igual responsabilidades y derechos para con los pequeños y tanto merece convivir la madre como el padre con sus ellos.
La mujer enferma de celos, histérica, la madre controladora, posesiva y chantajista hará todo lo posible por evitar el contacto y comunicación de los hijos con el padre. Será capaz de fingirse enferma con tal que el hijo no disfrute los días de su convivencia con el padre, así sean las vacaciones, su cumpleaños o una visita casual. Tratará de manipular la situación y hacerse la víctima cuando no lo es. Verá al padre como un cajero automático y a los hijos como la forma de asegurarse una casa, carro y hasta mejorar su economía.
Algunas mujeres cuando ya ven perdido su matrimonio son capaces de embarazarse a sabiendas que la pareja ya está en un punto sin retorno y a pesar que existe cantidad de métodos anticonceptivos saldrán embarazadas curiosamente. La razón, un hijo vale en Juzgado en promedio del 12% al 15% de los ingresos comprobables del marido y si sabe que es un buen hombre, si es alguien que ama a los hijos dará mucho más con tal que los chicos estén bien desde su concepción hasta que terminen su carrera e incluso hasta que se casen!!!
Cada vez son más los hombres que se hacen cargo de los hijos, que desean su custodia por puro amor y con tal de obtenerla dan de más al momento de las negociaciones en el divorcio. Muchos hombres de buena cuna, y esto aclaro nada tiene que ver con su condición económica son responsables de sus actos y de su vida, absorben el total de los gastos de los hijos menores o no y son capaces de donarles sus propiedades a los hijos con tal de asegurarles un patrimonio.
Que piden a cambio… nada. Son tan hombres que ni siquiera pedirán una llamada el día de su cumpleaños, un pastel el día del padre o una corbata pasada de moda en Navidad. Ellos son felices solamente con ver a sus hijos crecer, sonríen con sus triunfos y los animan en sus derrotas. Sí Dios les da la bendición de ser abuelos serán los que más chiflen a los chiquillos.
Así que ni te metas a criticar porque se divorció, o peor aún porque siguió casado sabiendo que su matrimonio fracaso. Quizá tú seas la razón de la boda de tus papas, pero también seas la razón por la que se divorció. Cómo yo??? Si, para evitar que vieras más pleitos, para evitarte que estuvieras en medio de discusiones inútiles, que fueras objeto de chantaje. Para que no aprendieras a ser un “Gutierritos”. Y aunque tu madre sea excelente publicista y tus tías sus mejores defensoras, jamás sabrás lo que realmente ocurrió.
Tienes a tu padre contigo… dale un abrazo solo por ser tu papá, ¡¡¡SE LO MERECE!!!
