Mucho se habla en los aniversarios de las fundaciones hechas por Alberto del Canto en 1577 (Villa de Santa Lucía), Luis de Carvajal en 1582 (Villa de San Luis Felipe Rey) y principalmente de Montemayor el 20 de septiembre de 1596 (Ciudad Metropolitana de Nuestra Señora de Monterrey), pero nos hemos olvidado un poco de darle su mérito a Martín de Zavala en el desarrollo del Nuevo Reino de León posterior a la muerte del fundador de Monterrey.
Con cédula real en mano el 24 de agosto de 1626 ante el cabildo regiomontano (Archivo Histórico de Monterrey, en lo sucesivo AHM Actas de Cabildo, expediente 1626/003) se presentó como Gobernador, iniciando su gestión con actividades importantes como la realización de un censo en la ciudad de Cerralvo para conocer las necesidades de los habitantes. (AHM. Colección Civil volumen 2, expediente 2).
Fundador de la Villa de Cadereyta, mencionado así en los Protocolos del Archivo Histórico, con fecha 22 de octubre de 1710, tenemos en las descripciones un: “…testimonio de la carta de fundación de la villa de San Juan Bautista de Cadereyta, hecha por el Gobernador Martín de Zavala el 25 de febrero de 1638. Testimonios expedidos a solicitud del Gral. Francisco Báez Treviño, apoderado del Cap. Juan Miguel de Vértiz, por el Gral. don Antonio Fernández Vallejo, Alcalde Ordinario de primer voto. Testigos, Manuel Ángel de Robles y Miguel González del Castillo.” (AHM, Ramo Protocolos, Volumen 9, Expediente 101 No. 31.)
Su labor en Monterrey fue valiosísima, al modernizar y comenzar a poner en los primeros planos a la Ciudad, incluso gastando de su propio dinero y seguramente no siendo remunerado (porque muchas veces se hacían las cosas en esta provincia sin que el virrey llegase siquiera a enterarse), en llevar a cabo construcciones de iglesias, conventos y al engrandecimiento de las Casas Reales.
Muere un día 8 del mes de agosto de 1664 en esta ciudad de Monterrey, donde gobernó por 38 años y logro encaminar hacia la consolidación que actualmente la define como una de las mejores ciudades de Latinoamérica, en el edificio de las Casas Reales ubicado donde ahora se encuentra el Museo Metropolitano de Monterrey, siendo sepultado en el otro edificio que se comenzó construir después de las inundaciones, La Catedral Metropolitana de Nuestra Señora de Monterrey.
Nos regala Don Roberto Jorge Lozano un último comentario, que lo dejo a consideración de Ustedes, estimados lectores, para que opinen acerca de este gran personaje: “Si bien Martín de Zavala no fue uno de sus fundadores (de la Ciudad de Monterrey) si se le puede considerar como el que consolido e impulso el desarrollo de nuestro ciudad poniendo para ello, no solo su trabajo sino también sus bienes, qué lo llevo a morir en la pobreza, por lo que para su entierro fue necesario pedir contribuciones a los vecinos de nuestra ciudad”.
Esto, a mi muy particular criterio, lo engrandece aún más… ¿Qué opinan Ustedes?
