Un extenso artículo del Guardian comenta que Rusia y China que son, a simple vista, rivales y competidoras, se aprestan a crear un fuerte eje del nuevo orden mundial. A pesar de sus posturas contradictorias, los une el deseo de resistirse a la hegemonía de los Estados Unidos.
Las cumbres de la Organización de Cooperación de Shanghái y del BRICS a realizarse esta semana en Ufá, al centro de Rusia, indican que Moscú sabe que está por tomar el liderazgo en las regiones que más rápidamente crecen en este planeta.
Las cumbres europeas y las reuniones del G7 son nada ante las verdaderas reuniones que se celebrarán esta semana en Rusia y que estarán presididas por Vladímir Putin.
Los líderes de Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica se reunirán en la cumbre del BRICS el día 8 de julio y el día 10, Rusia y China también negociarán en el marco de la Organización de Cooperación de Shanghái con otros cuatro jefes de Estados involucrados. A estos dos bloques hay que agregar que Moscú y Pekín colaboran en el Consejo de Seguridad de la ONU, en la APEC y en el G20, lo que deja en claro la sólida conexión entre ambos países.
En la última década el intercambio comercial entre los dos países ha aumentado un 600 por ciento. En 2014 Moscú y Pekín firmaron el mayor acuerdo de gas de la historia. En estos días buques de guerra rusos y chinos realizaron maniobras conjuntas en el Mediterráneo. En septiembre próximo los presidentes de Rusia y China encabezarán en Pekín a las ceremonias por el 70 aniversario del fin de la II Guerra Mundial.
Esta semana la ciudad rusa de Ufá acoge dos decisivas cumbres financieras internacionales. Una de los BRICS y otra de la Organización de Cooperación de Shanghái. El centro de atención de las cumbres será la situación financiera actual.
La cumbre de los BRICS en Ufá y ahí mismo se celebrará la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái. Estas reuniones también estimularan negociaciones bilaterales.
Estados Unidos ha movilizado a la comunidad internacional para ejercer presión sobre Rusia y el país está en un aislamiento creciente, se dice desde la Casa Blanca. Sin embargo pero el hecho de que esta semana Rusia cobije dos cumbres internacionales de primer nivel pone en duda el grado de aislamiento.
Los cinco miembros del bloque BRICS representan un 40 por ciento de la población mundial. Por su parte la Organización de Cooperación de Shanghái, en su composición actual aún sin la India y Pakistán, que están por incorporarse, significa una cuarta parte de la población del planeta.
La cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái que incluye a Rusia, China, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Uzbekistán esta por incorporar a la India y Pakistán que permitiría formar un nuevo G8.
Para el presidente chino Xi Jinping, la cumbre de los BRICS es la oportunidad de introducir cambios en el orden económico mundial. El foro buscará los parámetros prácticos del funcionamiento del nuevo Banco de Desarrollo del bloque y el fondo común de reservas monetarias.
Con un peso conjunto en el Producto Interno Bruto mundial que sigue aumentando, los países del BRICS están incrementando su influencia internacional.
El Banco de los BRICS estará entre las principales instituciones financieras y se especializará en proyectos de infraestructura para contribuir al desarrollo del comercio tanto público como privado.
Los BRICS, como el resto de los observadores de las acciones del BM y del FMI, no están contentos con el hecho de que solo se pretenda reformar el FMI y el Banco Mundial para coordinar sus prácticas con la realidad. El porcentaje que representan los BRICS en la economía global ya ha superado el 30 por ciento del PIB mundial. Hay que considerarlo y adecuar los mecanismos en la toma de decisiones cuotas, préstamos, tasas, etc.
Mientras el Banco de Desarrollo del BRICS está incorporando a más estados fundadores, para convertirlo en alternativa de las instituciones existentes, aunque esto depende de muchos factores.
Según datos, entre 2001 y 2014 el BRICS aumentó su peso en el PIB mundial del 19 al 30 por ciento. Y solo en 2014 representaba el 45 por ciento de la industria agrícola del mundo, el 17 por ciento del comercio mundial y el 13 por ciento de los servicios. Un afamado analista dijo con optimismo que el potencial del Banco de los BRICS puede aliviar la situación financiera de las economías vulnerables de la eurozona y a su vez podría disputar la hegemonía a las instituciones financieras tradicionales, permitiendo que otros países accedan al crédito sin acudir a los mismos “prestamistas”. Esta nueva institución bancaria y financiera vendría a balancear el poder que hoy tienen los sectores más conservadores de la Unión Europea que proyectan una Europa neoliberal y ordenada, pero bajo la hegemonía norteamericana.
Confeti
Alertamos a nuestros “amigos” del BM y del FMI para que mejor se arreglen con Grecia pues podrían arreglarse con el Banco de los BRICS y separar de la eurozona lo que sería un mal ejemplo para los otros deudores ¿no?
Confeti ajeno
¿Qué pasará con el TRI, caro y malo, y al Piojo más caro y mas malo?
