Barack Hussein Obama prestó juramento ayer lunes para su segundo mandato como Presidente y usó su segundo discurso inaugural para llamar a mayores esfuerzos para combatir el cambio climático, invertir en educación y garantizar la igualdad de derechos para los homosexuales.
Obama, de 51 años, tomó su juramento a las 11:51 de la mañana de este lunes en un día gris y frío en Washington, mientras las ovaciones resonaban en una multitud que se extendía en todo lo largo de la Explanada Nacional. La ceremonia tuvo lugar el día de Martin Luther King y los recordatorios de la sangre y el sacrificio dieron peso a la segunda toma de posesión de un Presidente afroamericano.
Después de su juramento, Obama pronunció un discurso de 19 minutos que en ocasiones dio la impresión que se trataba de un detallado y politizado Discurso del Estado de la Unión. Se refirió a la reforma fiscal, a Medicare, al seguro social y a Newtown, Connecticut, donde el tiroteo ocurrido en diciembre estimuló un nuevo impulso de Obama por leyes de armas de fuego más estrictas.
Obama también evocó un tema de su campaña de reelección: el de la paciencia agotada. El Presidente afirmó que el capital paralizado -e, implícitamente, los republicanos que lucharon en contra de sus ideas- se movía demasiado lento en un momento de urgencia.
“No podemos confundir el absolutismo por principio, un espectáculo simulado por política o tratar a las injurias como un debate razonado.
Debemos actuar con la conciencia de que nuestro trabajo será imperfecto”, manifestó.
Obama, en realidad, comenzó su segundo mandato el domingo, con una ceremonia privada en la Casa Blanca que cumplió con el requisito constitucional de la toma de posesión el 20 de enero. Ayer, varios oradores recordaron la intranquila historia del país con la raza. Un coro cantó el “Himno de Batalla de la República”, un himno por la causa de la Unión durante la Guerra Civil. Y Obama juramentó con su mano sobre una maltratada Biblia usada por Abraham Lincoln.
En su discurso, Obama conectó esos sacrificios históricos con sus luchas políticas por la igualdad actuales, al mencionar los esfuerzos para garantizar las oportunidades económicas para los pobres y los inmigrantes, y los derechos civiles de los homosexuales.
“Nosotros, el pueblo, declaramos hoy que la más evidente de las verdades -que todos somos creados iguales- es la estrella que aún nos guía. De la misma manera en la que guió a todos esos hombres y mujeres, célebres y anónimos, que dejaron sus huellas a lo largo de esta gran explanada, para escuchar a un predicador decir que no podemos caminar solos, y oír un rey proclamar que nuestra libertad individual está indisolublemente ligada a la libertad de cada alma en la Tierra”, exclamó.
El discurso de Obama pareció más optimista que el de hace cuatro años, cuando advirtió a un país azotado por la recesión sobre un pesado invierno por venir. También reveló a un Presidente que no tiene que enfrentarse a otra elección. Las palabras de Obama sobre los derechos de los homosexuales y el cambio climático mostraron un tono más agresivo que el que tuvo durante su primer mandato.
Fuente: El Economista