Por Óscar Tamez Rodríguez:
Manuel Espino y su equipo proponen un partido político «pragmático sin ideología». Tres de los grandes de la teoría política tendrían serías discrepancias con él. Maurice Duverger en «Los Partidos Políticos» afirma que en algunos países los primeros grupos parlamentarios derivan de identidad ideológica lo que concluye en la creación de partidos. La otra forma de constitución de un partido es con el respaldo de sindicatos, grupos religiosos o sectarios. Concertación Mexicana tiene identidad con esta última forma de creación de un partido político. Por su parte Giovanni Sartori en «La Política» establece que se equivoca quien piense que puede haber práctica sin teoría: «El hombre práctico ´sin teoría´puede creer que sólo sigue la inspiración de su voluntad… Pero el estudioso sabe bien que también la praxis más instintiva implica siempre premisas mentales, propósitos, cálculos, ideas…» Así que ser pragmático no es ajeno a las ideas que constituyen ideologías. Vaya, Espino refleja una significativa ausencia de identidad política con su Concertación Mexicana. El partido de Manuel sería lo más parecido a un ser humano sin emociones, vivo pero frío y vació por dentro… Mañana seguiremos con la teoría de Norberto Bobbio.