Por: Jesús Orlando Pérez
“Uno de los concursantes por el contrato de los medicamentos para la clínica Municipal, dice que entregó 3 millones de pesos para ganar… y se los dio a alguien que es muy cercano a la Alcaldesa y que está en esta mesa”.
Así de intenso, el regidor priísta Arturo Pezina provoca una tormenta en plena sesión de Cabildo en Monterrey.
¿A quién…?
El tema de la licitación por los medicamentos, dice la Alcaldesa Margarita Arellanes, está totalmente apegado a la legalidad.
Aún así, exige pruebas primero… y nombres después, al regidor Pezina.
La secretaria del Ayuntamiento, Sandra Pámanes, le dice que es muy delicado acusar a cualquiera de los que allí están… “Porque está usted implicándonos a todos”.
Le dice que debe presentar pruebas, o de lo contrario se volverá cómplice.
La síndico primero, Irasema Arriaga, le advierte que sin pruebas, lo que hace es delicado e indigno… “Le exijo pruebas”.
Pezina no presenta pruebas… tampoco da a conocer nombres… eso sí, dice que va a platicar con el representante de la empresa que supuestamente entregó ese dinero a cambio del contrato, para ver si es realidad lo señalado.
¡Y cesó la lluvia!