Por: Luis Alonso Hernández
Que el niño de tres años jamás haya visto un chivo dentro de su corral puede explicarse…
Que Ever Montelongo, a sus 19 años se muestre admirado de ver al chivo, nos indica el nivel de urbanización social al que hemos llegado.
Ayer, en el último evento de Macrodomingos Familiares que organiza el Gobierno del Estado, recorrer las áreas instaladas ha significado descubrir.
Descubrir que hay obras que tienen tanto valor, o más, que un puente vial… o que una pavimentación.
“Esto nos pavimenta el alma”, dice el maestro Silverio García, quien acompaña al reportero durante el recorrido,
La verdad, la poca difusión que recibió en los medios este programa, no fue obstáculo para que pasara por desapercibidos.
Había fácilmente seis mil personas en recorrido… gente que se encontraba las instalaciones, o que venía por segunda o tercera vez, y la gran mayoría, porque un conocido o conocida les habló y les describió la experiencia.
Aunado a estos descubrimientos de cultura elemental, que incluyen bailables, actividades recreativas y sociales, también se brindaron apoyos en cuanto a tramitología.
Stands de las dependencias de gobierno, como Registro Civil, o de paraestatales como Agua y Drenaje estuvieron atendiendo; al final, 9 mil 600 personas fueron beneficiarias de ello.
Excelente todo, pues…
Lástima que se acabó, al menos por este año.
red-crucero.com