El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el presidente electo de México, el priista Enrique Peña Nieto, se comprometieron a estrechar tanto la integración económica de ambos países como la cooperación bilateral para reducir la violencia y fortalecer la frontera común.
Al inicio de un encuentro privado en el Despacho Oval de la Casa Blanca, Obama felicitó a Peña Nieto por su triunfo en julio pasado, y afirmó que México es, hoy por hoy, algo más que un socio importante de Estados Unidos.
¿Es México uno de los principales socios para Estados Unidos?
«México se ha convertido no simplemente en un importante socio bilateral sino que hoy es un líder multilateral, multinacional, muy importante en una amplia gama de asuntos, desde la energía hasta el cambio climático, y esperamos trabajar con México no sólo en asuntos regionales, sino también globales», afirmó Obama.
El mandatario estadounidense reiteró la voluntad de su Administración de fortalecer los vínculos económicos y comerciales con México, así como la coordinación bilateral en la frontera común y en la lucha contra el narcotráfico.
Obama destacó contribuciones de los mexicanos
Obama destacó las «increíbles contribuciones» de los mexicanos a la economía, sociedad y vida política de Estados Unidos, al tiempo que reconoció el interés de México en que EEUU logre una reforma migratoria integral.
Esa reforma migratoria, estancada en el Congreso desde 2010 debido a la falta de consenso, permitiría regularizar a los inmigrantes indocumentados en EEUU, buena parte de ellos procedente de México.
Tras ganar la reelección el pasado 6 de noviembre, Obama ha reiterado que comenzará a impulsar la reforma migratoria después de su toma de posesión para un segundo mandato en enero próximo.
Como ejemplo de la prioridad que tiene México para EEUU, Obama recordó que el vicepresidente Joseph Biden encabezará la delegación a la investidura de Peña Nieto el próximo sábado, algo que, según el mandatario, sólo se reserva a «países que figuran al frente de la lista» para Washington.
Por su parte, Peña Nieto, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), le propuso a Obama un «replanteamiento» de la relación bilateral, de manera que se haga énfasis en el intercambio comercial y económico.
Peña Nieto destacó que, con un pasado como legisladores locales, tanto él como Obama tienen «una gran sensibilidad sobre los problemas que enfrentan nuestros pueblos», como la generación de empleos ante la ralentización global.
«Considero conveniente hacer un replanteamiento de nuestra mayor integración para lograr en Norteamérica una región más competitiva y con capacidad de generar un mayor número de empleos, fortalecer la integración de Norteamérica y además abrir espacios de mayor relación con la región de Asia», dijo Peña Nieto.
Reorientar la relación bilateral
En ese sentido, subrayó el interés de su entrante Gobierno por acelerar el Acuerdo de Asociación Transpacífica (TPP, por su sigla en inglés), en cuyas negociaciones México ha sido invitado a participar.
Si bien desde su campaña electoral Peña Nieto ha buscado reorientar la relación bilateral hacia el área económica, hoy reconoció, no obstante, que México sigue afrontando retos en materia de seguridad.
«Mi Gobierno tiene un gran compromiso con los mexicanos para lograr la reducción de la violencia, por lo que estaré proponiendo una nueva estrategia que nos permita lograr ese objetivo», dijo.
Agregó que se propone aumentar la cooperación con EEUU para «construir fronteras modernas, seguras, que nos permitan estar mejor integrados en América del Norte».
Respecto a los esfuerzos de Obama de impulsar la reforma migratoria, Peña Nieto aseguró que, más que «venir a demandar esa reforma», quiere que México tenga un papel en ese proceso.
«Queremos ser o contribuir desde nuestro espacio a que se logre, a ver cómo podemos apoyar, respaldar tan importante iniciativa» para regularizar a la población indocumentada, y «eventualmente lograr un acuerdo de mayor movilidad de personas entre EEUU y México, subrayó.
Fuente: Univisión