Por: Luis Alonso Hernández
Lágrimas… desahogo de un agobio que solamente ellos y ellas conocían.
El Congreso del Estado aprobó hoy la Ley contra la desaparición forzada de personas.
Una ley polémica desde su nacimiento, que generó fricciones… que generó discrepancias y que finalmente, significa para un grupo de familias, simplemente Justicia.
¿En qué les ayuda?
Una mujer, que porta la foto de su hija desaparecida, dice que con esta ley en funciones, los policías de Juárez que se llevaron a su muchacho, tendrán que declarar.
“Ellos saben a quién se los entregaron… no han declarado, no lo dicen porque estaban con el amparo de que nada los obliga, si ahora guardan silencio van a ser cómplices y van a la cárcel”, dice.
Las expectativas son altas para ellos y ellas…
Por eso es que algunos fueron incapaces de contener el llanto.
Los diputados aprovechan y hacen por primera vez en lo que va de la legislatura, una votación nominal…
Cada uno de ellos se pone de pie, dice su nombre y el sentido de su votación… todos a favor.
Gran diferencia en 24 horas…
Ayer los laicos en contra de la Reforma al Artículo 24, les llamaban traidores a la patria… hoy, los padres, madres y familiares en general, de los desaparecidos, les aplauden, se solidarizan con ellos.
Una ley que transitó más de dos años por las mesas de trabajo, por las mesas de acuerdos…
Una ley que generó ataques políticos… pero que también permitió acuerdos.
Allí está…
El llanto es justificado, ellos y ellas saben por qué.