Un error humano fue lo que ocasionó el accidente aéreo en el que murió quien fuera secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora y siete personas más, el pasado 11 de noviembre.
En conferencia de prensa, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Dionisio Pérez Jácome, junto con el capitán Gilberto López Meyer, director general de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) dieron a conocer ayer el informe final sobre la investigación del accidente, en el que se establece que la decisión del piloto de cambiar de ruta ante las condiciones climatológicas en la zona de valle de Chalco originó la tragedia.
El capitán López Meyer dijo que el reporte del grupo investigador señaló que la causa probable fue la «decisión inadecuada de la tripulación al mando de la aeronave, de continuar con la operación durante la realización de un vuelo bajo las reglas de vuelo, no obstante el encontrarse con condiciones de vuelo por instrumentos, con visibilidad pobre o nula, lo que generó un impacto contra el terreno, sin pérdida de control, derivado de una pérdida de conciencia situacional, respecto a las elevaciones del terreno circundante».
Indicó que como factores contribuyentes se identificaron pérdida de la conciencia situacional; probable fatiga de la tripulación al mando de la aeronave y en particular del piloto; posible presión de la tripulación por privilegiar el cum0plimiento de la misión sobre la seguridad aérea; insuficiente supervisión del operador a la administración de los recursos humanos.
Añadió que como resultado de los hallazgos y conclusiones obtenidas de la investigación, la Comisión Investigadora y Dictaminadora de Acciones de Aviación recomendó, entre otras cosas, que el Poder Legislativo federal deberá considerar hacer las modificaciones legales necesarias para fortalecer la capacidad legal de la autoridad aeronáutica para realizar inspecciones y verificaciones técnico-administrativas a los operadores aéreos de aeronaves de Estado, distintas de las militares.
En tanto se formalizan las modificaciones legales necesarias, debe realizarse la adecuada coordinación a través de convenios entre autoridad aeronáutica y este tipo de operadores aéreos; continuar fortaleciendo la capacidad operativa y al supervisión así como la disponibilidad de recursos humanos, financieros y materiales de la autoridad aeronáutica.
También recomendó continuar la provisión a Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) de los recursos necesarios, a fin de que amplíe los servicios de control y procedimientos para helicópteros en las zonas con mayor operación.
Pérez Jácome dijo que con respecto a las medidas que se han tomado para mejorar la seguridad operacional es el fortalecimiento del presupuesto, con la consecuente contratación de más inspectores y más personal; incremento en el presupuesto para la adquisición de equipos, tanto de la Dirección General de Aeronáutica Civil, como del Seneam.
