Por Oziel Salinas:
La Presidenta del CEE del PAN en Nuevo León, Sandra Pámanes, parecía buitre hambriento al leer su discurso en las exequias del ex Diputado del PAN Hernán Belden, quien fuera asesinado tras haberlo secuestrado tres días antes junto a otros dos prominentes panistas que –curiosamente – fueron liberados; uno, sobrino del ex Gobernador Canales y el otro, sobrino del Alcalde Mauricio Fernández.
La dirigente del PAN incurre en una politización por tan lamentable evento, sin esperar la acción de las autoridades, que, sin duda, se hará en tiempo y forma.
Pámanes quiere denostar al Gobernador Medina, a quien acusó de irresponsable, y de paso, lanza su mortal veneno; de ésta forma, el asesinato del panista Belden se convierte en el arranque de su lucha por la gubernatura; hay rumores que nos dicen que – para ello – está preparando al inefable F. Elizondo; una mediocridad como Senador y doble perdedor del PAN.
Pámanes dijo además: “Todo ha sucedido en sus tres años de su mandato, hay qué frenar la ola de violencia que nos mantiene asolados y en zozobra; eso no es coincidencia, es incapacidad” (….) “el Gobernador es el responsable de esto” (sic), olvidando que el anterior fin de semana se registraron sólo en dos estados de la República, Guerrero y Tamaulipas, 28 crímenes similares.
También olvida que en Mayo pasado fueron muertos en la misma forma dos cuñados del dirigente del PRI estatal. Lo que quiere ésta señora es transmitirnos que la ola de violencia se debe a la nula actuación del Gobernador Medina; eso se llama usar éste deceso para lucrar políticamente.
Por su parte, ocho diputados locales del PAN le dan a Medina un plazo de 48 horas para que “salga a dar la cara y resuelva éste crimen; no aceptamos un muerto más” como si se tratara de la voluntad del Mandatario parar los crímenes producidos en un ambiente de asesinatos que pervive en TODO EL PAÍS; crímenes que suman más de sesenta mil en lo que va del sexenio.
Cuantitativamente debemos aclararle a esa ave de rapiña (Pámanes) que, en los últimos tres años han perecido en México – en similares “levantones” – más de 40 mil personas; aunque, para ella, sólo cuentan los que han sucedido en nuestro Estado.
¿Acaso no tiene similar – o quizá mayor – responsabilidad el Presidente Calderón? Ésta arpía no es capaz de visualizar más allá de sus narices al proclamar su ominoso e irresponsable discurso.
Mientras tanto, en la capital, el Senador Corral, miembro distinguido del PAN publicó una carta donde lo que menos le dijo al Presidente Calderón fue “colérico y cobarde”; no advierto en nuestra historia moderna un calificativo tan vergonzante y grosero hacia el Primer Mandatario¸ lo que significa que los panistas andan no sólo desorientados, sino esquizofrénicos.
La locura – o la amargura – del reciente tropezón panista en las elecciones federales, parece que los va encaminado hacia su fase terminal.
Andan al garete; Madero es un galimatías en la cúpula panista; su capacidad es nula e irresponsable; jamás he oído – de él – una autocrítica; anda dando bandazos a diestra y siniestra, haciendo acuerdos con la cúpula perredista y más tarde acude a una cita con Peña Nieto y ocho gobernadores del PAN; algo desconcertante, producto de su desquiciante locura política.